Las emociones son parte de la
naturaleza de cada una de las personas, a través de ellas manifestamos lo que sentimos, ya sea amor, tristeza, enojo, etc.. Sin
embargo, cuando no sabemos diferenciar entre tener hambre porque nuestro cuerpo
lo necesita y comer por ansiedad, éstas terminan por perjudicarnos.
Es en estos casos
cuando podemos dar paso a un problema de salud como la obesidad, por eso
debemos aprender a conocerlas y controlarlas, la inteligencia emocional es
básica para combatir nuestros problemas de sobrepeso, no así las dietas.
Para ello puedes
comenzar por comer poquito pero más seguido, eso evita que se agoten tus
reservas y entonces corras por comida, de igual forma, no comas para levantar
el ánimo, puedes hacerlo de otra manera como ir al cine con buena compañía.
También
controlar la ansiedad por comer desesperadamente y lo más importante es que
aprendas a decir: "No, gracias, no tengo hambre" o "no, gracias
no como tal cosa".
Fuente:
www.veintitantos.com