Un estudio expone que el ejercicio de intensidad moderada
puede ayudar a afrontar situaciones de ansiedad y estrés incluso tiempo después
de haberlo realizado. La investigación parte de la base
conocida de que el ejercicio mejora el estado de ánimo.
En el estudio se expuso a diversas
personas a imágenes de alto impacto emocional antes y después de haber realizado
ejercicio o períodos de descanso, según correspondiera.
El resultado fue que los participantes
que habían realizado ejercicio moderado mantenían durante más tiempo un mayor
control emocional.
Este tipo de hallazgos sirven de base
para realizar programas de ejercicio con el objetivo de tratar
a personas que sufran síntomas de ansiedad o estrés, lo cual
mejorará, sin duda, su calidad de vida.
Fuente:
www.vitonica.com